A partir de 1992 se dio un incremento en el registro de la plagiocefalia posicional debido a la campaña Back to Sleep (Dormir de Espalda), ahora llamada Safe to Sleep® (Seguro al Dormir), de la Academia Americana de Pediatría, dirigida a reducir el riesgo de MUERTE DE CUNA, en la que se recomendaba que los recién nacidos durmiesen boca arriba.
La mortalidad se redujo hasta en un 40%, pero provocó que, por mantener al infante en una misma posición, aumentarán los problemas de aplanamiento y/o asimetrías en sus cabecitas.
Actualmente, se estima una incidencia de 46.6% de asimetrías creaneales en los bebés entre las 7 y 12 semanas de vida . Este es un buen momento para tomar medidas para corregir la asimetría y evitar secuelas permanentes.
A simple vista pareciera que la asimetría craneal no es un problema grave, pero, si no se trata adecuadamente, puede provocar secuelas en el futuro desarrollo del bebé: